martes, 24 de noviembre de 2009
Billy
Mi peludito de algodon te hecho tanto de menos..extraño que te heches en mis pies y decir mil veces ''Bill me estas entumiendo ù.ú!!
extraño tus ladridos de bebe..y esos pequeños mordiscos que me dabas por no darte de MI galleta¬¬ que igual siempr eterminaba compartiendolata*0*..
mi cosito falta menos para verte^^'..
Amo a mi perro porque es la mejor compañia que hetenido ahora que he estado enferma y que tengo cuando no deseo que nadie más me este molestando...lo extraño!!
Dulces recuerdos..
Texto inspirado en esos grandes recuerdos infantiles, que yo creo todos tenemos,guardados en nuestro interior,pero que mas pronto que tarde florecen.
Niño feliz, correr y correr, pies enterrados,
superficie blanda, tuerce tobillos
Quien llegara primero
Cruzar la línea espumosa es la meta
Tu espuma serpenteando, entumecedora de pies
En un principio perturba , pero al siguiente sanas y curas.
Camino siguiendo tu huella, mi alma y mi respiración se tornan raras
Respiro distinto, la vida me parece más bella
y el alma mas sana
las olas golpean en las Rodillas blandenges , moja mis pantalones
cierro los ojos y respiro
Pensar y pensar, paso tras paso avanzar
Perdón mamá prometí no mojar mi ropa
Pero esa ola dijo otra cosa
Siempre ha sido una competencia las olas del mar contra mi ropa
siempre ganan y hoy no fue la excepción
Niño feliz, correr y correr, pies enterrados,
superficie blanda, tuerce tobillos
Quien llegara primero
Cruzar la línea espumosa es la meta
Tu espuma serpenteando, entumecedora de pies
En un principio perturba , pero al siguiente sanas y curas.
Camino siguiendo tu huella, mi alma y mi respiración se tornan raras
Respiro distinto, la vida me parece más bella
y el alma mas sana
las olas golpean en las Rodillas blandenges , moja mis pantalones
cierro los ojos y respiro
Pensar y pensar, paso tras paso avanzar
Perdón mamá prometí no mojar mi ropa
Pero esa ola dijo otra cosa
Siempre ha sido una competencia las olas del mar contra mi ropa
siempre ganan y hoy no fue la excepción
domingo, 15 de noviembre de 2009
jueves, 12 de noviembre de 2009
Maybe!..
Rompieron mis ilusiones, no me queda esperanza, olvide la felicidad, se agotaron mis sueños, murieron mis deseos.. Ahora, es dificil verme sonreir.
Un dia...sera...
Si, un día mas, siempre soñé que al volver a verte después de tanto tiempo podría decirte lo que sentía y así fue, lastima.
El día en que te volví a ver, sentí mi corazón dar un vuelco enorme, una alegría de la que no había disfrutado desde hace mucho me embargo y sentí que podría decirte por fin todo lo que significabas para mi, decirte que sin ti yo no podía hallarme, que siempre que te veía mi piel se erizaba y mis sentidos se perdían, lastima…
lunes, 9 de noviembre de 2009
domingo, 8 de noviembre de 2009
Dejando huella
Una red tejí para cubrir mis pasos cada vez mas alta y segura, pero descubrí que no era igual al sentir que no dejaba hundida, mi marca en ti.
He visto que proteger mis pasos, no me sirve...tal vez al principio no vea que mi huella pierde su profundidad, por llevar esta red que protege mi andar...pero se que tengo que ir marcando cada paso, en el que descubra como me apoyo y profundizo, al caminar junto a ti...y es por eso que mis pasos andan sin protección, notando como el roce de la calle, marca mi vida...
lleva mis palabras a ver como protegerse al andar, se pierde esa huella que marca nuestro paso... Tal vez por eso me gusta andar dejando huella, para que sientas un paso firme que tu seguridad...avanzando y sintiendo la huella de mi caminar, entre el sabor a un cafecito. Buen fin semana...
He visto que proteger mis pasos, no me sirve...tal vez al principio no vea que mi huella pierde su profundidad, por llevar esta red que protege mi andar...pero se que tengo que ir marcando cada paso, en el que descubra como me apoyo y profundizo, al caminar junto a ti...y es por eso que mis pasos andan sin protección, notando como el roce de la calle, marca mi vida...
lleva mis palabras a ver como protegerse al andar, se pierde esa huella que marca nuestro paso... Tal vez por eso me gusta andar dejando huella, para que sientas un paso firme que tu seguridad...avanzando y sintiendo la huella de mi caminar, entre el sabor a un cafecito. Buen fin semana...
¿?
Me persiguen aún los destellos del sueño increíble en el que gritando en una alameda, me cubre de pronto una ráfaga repleta de hojas de otoño en perfecta mezcla. Siento el aire fresco inundando mis pulmones y levanto los brazos en señal de plenitud. Cierro los ojos y disfruto una vez más de esa visión. Es hermoso, todo es simplemente hermoso y me llena de emociones que superan lo excelso. Luego el finale, como siempre.
Despierto y veo la ventana abierta, la ráfaga real que poco y nada tiene que ver con la del sueño, [la de allá, fresca y acogedora; la de acá fría, distante y nada amigable]... no hay hojas de otoño.
Me levanto, abro bien los ojos y cierro la dichosa ventana, antes de que el aire que llenaba mis pulmones, me regale, de paso, una pulmonía.
Y ahora?
Hace exactamente un año, en un correo electrónico enviado a uno de mis grandes amigos (y, en ese momento, mi soporte más importante) escribí lo siguiente:
Yo sigo cautiva de mi misma. A veces tengo la impresión de estar parada frente a la puerta de mi propia jaula, con las llaves en la mano, sin atreverme a abrirla por miedo a todo lo que hay afuera. Siento que no hay nada ni nadie esperándome... y me quedo adentro, en la cálida incomodidad de mis propios miedos.
Y había mucho y muchos esperándome afuera (empezando por el destinatario de mis palabras). A veces vuelvo a entrar a la jaula pero, por fortuna, ahora hay muchas más voces que me gritan que estarán allí, afuera, esperando a que salga para darme un fuerte abrazo.
Gracias a los dueños de todas esas voces.
Yo sigo cautiva de mi misma. A veces tengo la impresión de estar parada frente a la puerta de mi propia jaula, con las llaves en la mano, sin atreverme a abrirla por miedo a todo lo que hay afuera. Siento que no hay nada ni nadie esperándome... y me quedo adentro, en la cálida incomodidad de mis propios miedos.
Y había mucho y muchos esperándome afuera (empezando por el destinatario de mis palabras). A veces vuelvo a entrar a la jaula pero, por fortuna, ahora hay muchas más voces que me gritan que estarán allí, afuera, esperando a que salga para darme un fuerte abrazo.
Gracias a los dueños de todas esas voces.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)